Mis clases particulares son de Piano, Audioperceptiva, Lectura y Escritura Musical, Técnica Vocal, Armonía y Contrapunto, Composición, Improvisación y Lenguaje Musical. En todas ellas la prioridad es lograr una relación directa con la materia que se estudia, evitando los academicismos, los estereotipos, el aprendizaje basado en esquemas y modelos a imitar.
Tampoco establezco plazos y ciclos a la manera de un conservatorio, sino que me concentro en el proceso, en el crecimiento personal del alumno a través del estudio y la práctica del arte. No busco el éxito, luego de tantos años y de acompañar las carreras completas de muchos artistas, estoy convencido que el éxito es una consecuencia de un trabajo realizado cabalmente y no de la búsqueda de un resultado preestablecido.
Las clases que doy son individuales o grupales. En las clases de Piano enseño una técnica práctica y moderna, basada en unos pocos principios orgánicos y anatómicos y la mayor sencillez y economía de movimientos. No utilizo sólo obras de distintas épocas y estilos y ejercicios técnicos inevitables, si no que al poco tiempo propongo un acercamiento al instrumento no mediatizado, la exploración de sus características y posibilidades a través de la improvisación individual y grupal.
En las clases de Técnica Vocal me centro en la emisión natural de la voz, despojándola de todos los estereotipos y modismos que tanto perjudican la salud vocal y el estilo. Busco el timbre de cada voz particular, muchas veces oculto por una práctica inadecuada; el trabajo se basa en una emisión relajada, el apoyo respiratorio, la resonancia y la dicción.
Las materias emparentadas de Audioperceptiva, Lectoescritura y Lenguaje Musical las abordo estimulando el desarrollo de la capacidad del alumno de discriminar a través de la intuición, de la confianza en sus propias percepciones y de una adecuada conceptualización. Son materias difíciles y áridas para muchos estudiantes, y según mi experiencia esto sucede más bien por un abordaje inapropiado que por la naturaleza de las materias en sí. Además son muy útiles no sólo para los estudiantes de música, sino también para los de artes relacionadas, como la danza, el teatro, etc., y también para cualquiera que en su trabajo se relacione con la música, como críticos, escritores, y público en general.
En cuanto a la Composición, la Armonía, el Contrapunto y la Improvisación, mi punto de partida es la relación directa del estudiante con el material, en primer lugar el sonido, y luego el modo de organización propio de cada materia, de cada estilo, de cada trabajo. No enseño siguiendo patrones estilísticos predeterminados, si no que busco que al acercarse a cada tema el alumno interiorice su lógica y su problemática y lo transite a partir de su propia elaboración.
1 comentario:
Saludos, maestro... Espero poder volver pronto.
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